cicloturismo Acaba julio y parce que se acaba todo con él. Pero que esta circunstancia no te haga perder tu ideal de cicloturismo para el regreso de vacaciones.

El cicloturismo en vacaciones

¡Por fin acaba julio! Que estrés de semana final de mes. Parece que más que acabar un mes, parece que se acaba el mundo. Todo para ya, como si no hubiera vida más allá del 31.

Aunque para algunos esta fecha supone el final de las vacaciones, aunque son los menos (¿verdad Marta Q.?), para muchos supone la liberación y el éxtasis. Adiós a la rutina y al trabajo. Desconexión del día a día y desplazamiento a un nuevo entorno, nuevas actividades y nuevo ritmo de vida.

Aunque somos conscientes de que tiene fecha de caducidad, no podemos menos que sacar una sonrisa de oreja a oreja ante las expectativas que se nos abren ante nuestros ojos.

Este año será para mi algo especial. Después de un mes de julio complicado que me ha impedido tocar máquina, este mes de agosto la arranco sin plantarme aun el retorno a la bicicleta. A mi regreso me tocará empezar a hacer esa dichosa base que Chema Argüedas se empeña en inculcarnos, aunque luego llegan las fieras para cargárselo todo.

Pero este parón estival no es sinónimo de olvidarme del cicloturismo. Ni mucho menos. Tengo todo un mes de agosto para darle vueltas al coco.

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Retomar el pulso al cicloturismo en septiembre

Así que este mes de agosto, en lo que al cicloturismo se refiere, haré sólo un mini parón, ya que afectará a mi actividad física y también a las publicaciones en este blog. Haré alguna que otra para no perder el gusanillo, pero prefiero cargar pilas, leer mucho, coger nuevas ideas, investigar, chafardear otros blogs (¿espionaje industrial?… ojo Oscar S. D. con www.biktra.com , ¡ja ja ja!),… y sobre todo disfrutar de unas más que merecidas vacaciones en compañía de la familia.

La vuelta al “cole” estará repleta de grandes retos. El principal llega el 18 de octubre con la Marcha Cicloturista Solidaria Velo Club – Asociación Alba Pérez. Un evento que se organiza desde el corazón para unir los valores del ciclismo y el deporte con la solidaridad, valores que nuestra sociedad está perdiendo a pasos agigantados.

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Por otro lado está la manera de incentivar la participación en otras marchas cicloturistas que necesitan del apoyo de todo el cicloturismo. Marchas locales que tienen mucho más valor del que nos imaginamos. Es aquí donde realmente se forja el amor al cicloturismo y a la bicicleta, para que luego vengan las grandes marchas y se lleven los resultados. Si queréis saber más al respecto os invito a leer la entrada que hice al respecto “la supervivencia de las pequeñas marchas cicloturistas”.

Si a eso le uno el pensar ya en la programación personal del 2016, recuperar la forma física perdida, relanzar el Reto 2016 kilometros solidarios, además de aprovechar el periodo electoral para lanzar consignas ciclistas… el final de año se me antoja tremendamente apasionante.

Espero seguir contando con vosotros a la vuelta y que me aportéis nuevas ideas. ¡Felices vacaciones! Y a seguir disfrutando del cicloturismo en estado puro.

¡Salud y pedales a todos!

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